Apóstoles del Sagrado Corazón

Instituto secular fundado en Milán, en 1919, por Ernesto Busnelli.

El Instituto Secular Apóstoles del Sagrado Corazón (oficialmente en italiano: Istituto secolare Apostole del Sacro Cuore) es un instituto secular de mujeres, de la Iglesia católica, de derecho pontificio, fundado por el sacerdote jesuita Ernesto Busnelli, en 1919, en Milán. A las miembros de este instituto se les conoce como apóstoles del Sagrado Corazón.[1]

Instituto Secular Apóstoles del Sagrado Corazón

Sagrado Corazón de Jesús, titular del instituto.
Nombre comúnApóstoles del Sagrado Corazón
GentilicioApóstoles
TipoInstituto secular de mujeres, de la Iglesia católica, de derecho pontificio
FundadorErnesto Busnelli
Fundación1919
Lugar de fundaciónMilán, Italia
Aprobación1955
Lema«Amor sin límites»
ReligiososAlrededor de 500
CuriaVia Arnaboldi, 2 Milán-Italia
PresenciaArgentina, Bolivia, Brasil, Italia, Perú y Venezuela
ActividadesSecularidad
Sitio webapostolesacrocuore.org
Datos Anuario Pontificio 2015

Historia

El sacerdote jesuita italiano Ernesto Busnelli, inició en Milán, en 1919, una especie de asociación de mujeres, que sin abandonar la vida secular, profesaban los consejos evangélicos. Las primeras profesiones fueron realizadas en 1924. El instituto sufrió la problemática de todos los institutos seculares que aún no encontraban una forma jurídica en el seno de la Iglesia católica, por ello, la primera aprobación (1936), contra la voluntad del fundador, fue como Pía Asociación, es decir, como un grupo de laicos. Superadas las dificultades, la asociación recibió la aprobación como instituto secular de derecho diocesano, el 17 de abril de 1950.[2]​ Más tarde, el 24 de marzo de 1955, la Santa Sede dio la aprobación pontificia.[1]

Organización

El Instituto Apóstoles del Sagrado Corazón es un instituto secular de derecho pontificio, dividido en provincias, bajo el gobierno de una presidente general. Las apóstoles del Sagrado Corazón viven como consagradas desde la secularidad, en medio de sus familias, trabajos civiles y pastorales particulares. Todos proveen a su propio sustento. Fin específico del instituto es la ayuda a las vocaciones sacerdotales, religiosas, misioneras y seculares, en todos los modos indicados por sus constituciones y por la Iglesia. Su espiritualidad se fundamenta en la devoción del Sagrado Corazón de Jesús, a quien tienen como símbolo y síntesis de la Redención. Aparte de los tres consejos evangélicos, comunes a los institutos de vida consagrada, las apóstoles del Sagrado Corazón hacen una promesa de fidelidad al Papa.[2]

Las apóstoles tienen como lema «amor sin límites», son poco más de quinientas y están presentes en Argentina, Bolivia, Brasil, Italia, Perú y Venezuela.[3]

Referencias

Bibliografía

  •  
  • I. Roma: Edizione Paoline. 

Enlaces externos