Estado cliente

estado subordinado a otro más poderoso en materia económica, política o militar

Un Estado cliente es un Estado controlado a nivel económico, político o militar por otro estado más poderoso en asuntos internacionales. El tipo de relación es una relación bilateral normalmente benéfica, y con obligaciones mutuas, pero diferentes.[1]

A lo largo de la historia, muchos países han practicado el clientelismo frente a países cuya subordinación podían asegurar sin tener que asumir el costo. Los tipos de estados clientes incluyen: Estado satélite, Estado asociado, Estado títere, neocolonia, protectorado, Estado vasallo y Estado tributario.

Ejemplos

  • La República romana creó una gran cantidad de estados clientes que luego fueron absorbidos por el Imperio.[2][3]
  • Los estados principescos de la India eran entidades nominalmente soberanas de la India británica que no eran gobernadas en forma directa por los británicos, sino por gobernantes nativos bajo un esquema de gobierno indirecto,[4]​ sujeto a una alianza subsidiaria y la suzeranía de la Corona Británica.
  • Françafrique es el nombre con el que se conoce la relación de Francia con sus antiguas colonias africanas,[5]​ a veces extendida a las antiguas colonias belgas. En la actualidad el término es utilizado en algunas ocasiones para criticar la presunta relación neocolonial entre Francia y sus antiguas colonias africanas. Los países involucrados proveen petróleo y minerales importantes para la economía francesa. Además, compañías francesas tienen intereses comerciales en varios países del continente. Por si fuera poco, los países francófonos de África ayudan a sostener la imagen de Francia como potencia mundial, al brindarle votos de apoyo a las iniciativas francesas en la ONU.[6]
  • Corea del Norte a veces se ha visto como un estado cliente de China desde el colapso de la Unión Soviética en 1991.[7]
  • Algunas fuentes consideran que el pequeño país de Nauru, en la isla del Pacífico, es un estado cliente de Australia, ya que depende en gran medida del apoyo económico de Australia, utiliza la moneda y los procesos de Australia y alberga llegadas no autorizadas de solicitantes de asilo a Australia en virtud de la Solución Pacífico.[8]​ En una columna publicada en el periódico británico The Guardian, Ben Doherty escribió que "Nauru es un estado cliente en todos los sentidos, funcionando solo por su vecino rico. Pero su dependencia de la generosidad australiana hace que su gobierno dependa totalmente de los intereses del benefactor, incluso a expensas de su propia gente" y describió a Nauru como un "pequeño y empobrecido estado cliente en el medio del Pacífico".[9]

Referencias

Enlaces externos